martes, 17 de marzo de 2015

Marzo 14

          8) Cristo entregó a san Pedro las llaves del Reino celestial; pero te estableció a ti como sustituto suyo para la Madre. Un día María se comprometió con José, pero fue confiada a ti. A él le dijo un ángel: "No temas recibir a María, tu esposa" (Mt 1, 20). Ahora el Señor de los ángeles te dicen a ti: "Aquí tienes a tu Madre" (Jn 19, 27); y así como José estuvo cerca de la Virgen en el nacimiento del Hijo, también tú debes estar a su lado en la pasión de Cristo, y durante largo tiempo después de su ascensión al cielo.

No hay comentarios :

Publicar un comentario